Una ola de fanáticos del fútbol se congregó en el aeropuerto de Arabia Saudita para recibir al delantero Lionel Messi y al equipo de Argentina, lo que provocó que las autoridades reforzaran las medidas de seguridad y la 'Pulga' tenga que abandonar el lugar rodeado de armas.En las imagenes de la llegada al terminal, se observa al argentino asustado porque la ametralladora AK-47 de uno de los miembros de la seguridad le apunta directamente al rostro. Tras superar el incómodo momento, los jugadores fueron escoltados a su hotel, donde permanecerán hasta el amistoso ante la delegación saudí en Ryad.