Aunque le resulte difícil de creerlo, un juez de línea búlgaro tuvo la genial idea de contestar el teléfono mientras arbitraba un partido. El juego pertenece a una liga menor del fútbol de Bulgaria. Sin embargo, no por ello debía desatender sus obligaciones como autoridad dentro del campo de fútbol.
¿Qué le diría al árbitro?