El volcán Sakurajima, ubicado en la prefectura de Kagoshima (suroeste de Japón) entró en erupción, lanzando una gran cantidad de rocas y lava, formando, además, una columna de cenizas volcánicas de casi 5 mil metros.La erupción no ha dejado víctimas que lamentar y las autoridades han decidido resguardar a los ciudadanos de Kagoshima con múltiples medidas de seguridad, entre ellas la suspensión del transporte ferroviario.