En nuestra constante búsqueda del éxito, podemos terminar cometiendo errores que, a simple vista, parecen mínimos pero a largo plazo impiden que culminemos nuestros objetivos. Es por ello que la prestigiosa revista estadounidense Forbes realizó una lista de 13 actitudes y errores que adoptamos y terminan afectando nuestro éxito.* Errores de gramática: Tener una mala ortografía y el uso incorrecto del idioma dan una mala imagen de nosotros como profesionales. Muchas veces se asocia a las personas con este tipo de errores con problemas de atención e, incluso, ignorancia.* Siempre dar excusas: Estar constantemente buscando como justificar nuestros errores en vez de concentrarnos en subsanarlos es el peor camino. No solo nos da una imagen de irresponsables sino que también afecta el entorno laboral.* Primar velocidad a calidad: No por querer realizar una venta lo más rápido que se pueda o entregar una asignación en poco tiempo vamos a descuidar el 'valor agregado'. Se debe buscar siempre el valor diferencial.* Hablar mal de los colegas: Se debe aprender a separar el lado emocional y el laboral. Si alguna vez tuvo un problema con algún compañero o excompañero hablar mal de él no contribuirá a mejorar su imagen y tendrá el efecto contrario, aun si la crítica está justificada.* Expectativas poco realistas: Es bueno apuntar alto, pero uno debe ser coherente con sus proyecciones. Si bien debemos confiar en nuestras capacidades y buscar siempre alcanzar nuestros sueños, hay que mantener los pies en la tierra para evitar 'caer de bruces'.* Culpar a otros por nuestros errores: Utilizar 'chivos expiatorios' puede parecer una alternativa tentadora pero solo demuestra irresponsabilidad y puede terminar creando un problema mucho mayor.* Poca paciencia: Llegar a nuestras metas puede ser un camino muy largo y requiere bastante sacrificio. Tener paciencia es clave para lograr el éxito. Si nos rendimos a mitad de camino, todo habrá sido en vano.* Olvidar nuestros motivos: Si en el camino olvidamos el porqué de nuestra dirección terminaremos siendo esclavos de una rutina. Debemos mantener siempre en mente los motivos que nos motivaron a trazarnos esa meta y usarlos como combustible para seguir.* Falta de intención: Si se pierde la intención, se pierde el rumbo. Si uno no tiene la firme convicción de llegar a una meta, no podrá hacerlo.* Sobrecargarse: “El que mucho abarca poco aprieta”. Evitemos sobrecargarnos, así podemos dedicarnos al 100%.* Complicarse al decidir: Siempre se debe buscar un balance, pero que el acto de reflexionar no se extienda “por siempre”. Debemos arriesgarnos a tomar decisiones y mantenernos firmes.* Primar el hacer al pensar: Planear es tan importante como ejecutar. De nada sirve trabajar el doble si al final no se está reflexionando sobre el siguiente paso. * Compararse: No es saludable estar comparándonos con otros. Nos puede crear sentimientos de inferioridad o superioridad que, al fin y al cabo, no aportan. Debemos mejorar por y para nosotros mismos.